Historia de Montijo desde los orígenes al siglo XVIII
Pablo Iglesias Aunión
Escudo de la Orden Militar de Santiago
Montijo cuenta con un rico pasado capaz de remontarse hasta època prehistórica es decir, hasta esos momentos -complejos- en el que la carencia de la existencia de la escritura nos hace recurrir al conocimiento arqueológico y poder así entablar un diálogo con los restos que son productos del quehacer humano: hablar con aquél ayer que se ha dejado caer en el presente de la tierra.
Justo cuando aparecen los primeros testimonios escritos es cuando podemos decir que nos adentramos en la Historia.
Pero no queremos hacer una historia sobre Montijo dsesvinculándolo de su mismo entorno propiamente contextual-histórico es decir, de ese Montijo que pudiera aparecer solitario, caminante desvirtuado de sus compañeros, de esas otras localidades que nacen en una misma similitud histórica o que son capaces de comparecer ante un juicio analítico adecuado.
Creemos en la Historia como disciplina académica y con una métodología apropiada -no nos cansaremos de decirlo- porque creemos en la ascendencia humana a lo largo del tiempo, en una Historia en la que el hombre puede apoyarse para conocerse y orientarse en la vida.
Vamos a pretender con ellos huir de espacios oscuros, opacos, irreales: "A la mitad del viaje de nuestra vida, me encontré una selva oscura por haberme apartado del camino recto. ¡Ah! Cuán penoso me sería decir lo salvaje, áspera y espesa que era esta selva, cuyo recuerdo renueva mi temor; temos tan triste, que la muerte no lo es tanto..." (El Infierno. Canto Primero. La Divina Comedia: Dante).
Nuestra historia, la historia de Montijo como la de cualquier localidad, pero nos concierne aquí nuestro entorno, es como diceJ Josep Fontana, la historia de cada institución y cada grupo social, los cuales poseen una identidad propia que se acompaña de un pasado inscrito en las representaciones colectivas de una tradición que lo explica y lo justifica (de su obre Historia. Análisis del pasado y proyecto social del presente).
Y siguiendo al maestro Fontana, en nuestra historia abordaremos con orden, lógica y sentido histórico los monumentos públicos y privados porque también encierran representaciones figuradas y de la misma manera, son importantes los fundamentos religiosos y profanos de aquellos sistemas sociales que estaban vigentes.
De esta manera concebiremos la Historia como lo hacía Herodoto, desde la totalidad de la actividad humana y podemos como el mismo decía, hacer que los historiadores explicasen los acontecimientos que contaban. Explicasen, nunca una mera limitación al copiar.
Así empezaremos por aquel pasado remoto de orígenes romanos y continuaremos con la Edad Media, nada de "oscuridad y siniestralidad" y aún menos "invención o suposición", sino viva y llena de nacencia geográfica perfectamente localizada y bien abordada.
Para poder ofrecer al lector una idea de lo que queremos, os dejamos un primer enlace de una publicación que a modo de revista digital se editó en septiembre de 1998. Cada espacio, cada momento y cada capítulo de esta historia, se irá subiendo al espacio titulado "Historia e Identidad".
Placa conmemorativa de la reconstrucción de la Puerta del Pilar de Badajoz
Vamos a pretender con ellos huir de espacios oscuros, opacos, irreales: "A la mitad del viaje de nuestra vida, me encontré una selva oscura por haberme apartado del camino recto. ¡Ah! Cuán penoso me sería decir lo salvaje, áspera y espesa que era esta selva, cuyo recuerdo renueva mi temor; temos tan triste, que la muerte no lo es tanto..." (El Infierno. Canto Primero. La Divina Comedia: Dante).
Nuestra historia, la historia de Montijo como la de cualquier localidad, pero nos concierne aquí nuestro entorno, es como diceJ Josep Fontana, la historia de cada institución y cada grupo social, los cuales poseen una identidad propia que se acompaña de un pasado inscrito en las representaciones colectivas de una tradición que lo explica y lo justifica (de su obre Historia. Análisis del pasado y proyecto social del presente).
De esta manera concebiremos la Historia como lo hacía Herodoto, desde la totalidad de la actividad humana y podemos como el mismo decía, hacer que los historiadores explicasen los acontecimientos que contaban. Explicasen, nunca una mera limitación al copiar.
Así empezaremos por aquel pasado remoto de orígenes romanos y continuaremos con la Edad Media, nada de "oscuridad y siniestralidad" y aún menos "invención o suposición", sino viva y llena de nacencia geográfica perfectamente localizada y bien abordada.
Para poder ofrecer al lector una idea de lo que queremos, os dejamos un primer enlace de una publicación que a modo de revista digital se editó en septiembre de 1998. Cada espacio, cada momento y cada capítulo de esta historia, se irá subiendo al espacio titulado "Historia e Identidad".
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